¿CUÁNTA AGUA HAY QUE BEBER?
Ya hace calor. En esta época se intensifican las recomendaciones de beber suficiente agua, de mantener una hidratación correcta, de extremar las precauciones con los niños y los ancianos...pero, ¿cuánta agua es la que hay que beber?
Está muy definida la medida de los dos litros de agua al día ¿pero es esa una recomendación que sirva para cualquier persona en cualquier lugar y circunstáncia? Claro que no!!, el volumen de agua que necesita una persona varía según el ejercicio que haga ese día, la temperatura ambiental, su estado de salud, etc.
Para un adulto sano, las necesidades de agua rondan los 30-35ml por kg de peso al día. Eso sería, para alguien de 54 kg entre 1.6 y 1.8 litros diarios, en cambio para otra persona que pese 80kg las necesidades estarían entre los 2.4 y los 2.8litros. Vemos que hay una diferencia sustancial.
Este cálculo se aplicaría a personas con actividad física moderada y a una temperatura ambiental media, las necesidades se verían aumentadas en caso de sudoración intensa, ejercicio físico, temperatura ambiental elevada...
Esa agua no es sólo el agua que bebemos como tal, aproximádamente un 20% la consumimos a través de los alimentos. Y por supuesto también cuentan las bebidas diferentes del agua que se tomen (cafés, infusiones, zumos...)
Otras recomendaciones hablan de 1 ml de agua por cada kcal ingerida en adulto sanos y 1.5ml de agua por kcal ingerida en niños y ancianos. Aunque este sistema a mi me parece menos útil, ya que ¿qué estimamos las kcal ingeridas o las recomendadas? porque puede haber una gran variabilidad entre ambos conceptos.
Durante el embarazo y la lactancia aumenta en las mujeres la necesidad de agua. Gran parte del aumento de peso en el embarazo es agua (líquido amníotico, sangre y la contenida en los tejidos tanto de la placenta como del feto).
En la lactancia es obvio que el mayor componente de la leche es agua (alrededor del 90%), así que la madre deberá aumentar la ingesta de agua para cubrir la producción de leche que hidratará y alimentará al bebé.
Durante la lactancia se deberían sumar unos 650-700ml más de agua, mientras que en el embarazo, al ser paulatino el aumento de líquido en el organismo de la madre, bastará con beber medio vaso más al día ,especialmente en el último trimestre. Los requerimientos aumentarán si hace mucho calor o se realiza ejercicio físico.
Es importante señalar que en caso de que el bebé tome lactancia artificial, el agua que se use para preparar el biberón tenga un bajo contenido en sales minerales (agua de mineralización débil) ya que usar agua rica en sales puede sobrecargar el organismo del niño y favorecer la hipertensión en un futuro. Además así nos aseguramos de mantener intacta la formulación de la leche maternizada.
En los niños, hemos visto que sus necesidades son proporcionalmente mayores que las de un adulto, así que es importante sobretodo en esta época procurar que tengan agua a mano y ofrecérsela con frecuencia Agua, No zumos, ni refrescos. Agua.
Además de hidratarlos correctamente, estamos creando hábitos. Y el hábito saludable es que el agua sea la bebida principal de referencia.
En el caso de los ancianos, a menudo tienen disminuida la sensación de sed, lo que hace que no beban lo suficiente, y por ser un grupo poblacional con más riesgo de deshidratación es importante cuidar de que beban a menudo, insitiendo en ello si hace falta y procurando que la dieta tenga un elevado aporte hídrico (fruta fresca, ensaladas, verduras, cremas, gazpachos...).
¿Me hidratan más bebidas que no sean agua? no, para mantener una hidratación adecuada no hay necesidad ninguna de recurrir a bebidas diferentes del agua, podemos hacerlo por gusto, pero a menudo las elecciones son cualquier cosa menos saludables, o parecen más saludables de lo que son, como ocurre con los zumos.
Beber agua es inexcusable, podemos sustituir una pequeña parte por otras bebidas (no más del 10%), pero el agua debería ser nuestra bebida habitual. Si cuando bebes algo, por norma es otra cosa diferente al agua,deberías revisar tus hábitos.
¿Demasiada agua puede perjudicarnos? en principio no se ha establecido una ingesta máxima de agua en personas sanas, ya que el organismo dispone de los mecanismos necesarios para regularlo. Sin embargo, pueden aparecer problemas cuando se supera la capacidad de los riñones para eliminarla (entre 0'7 y 1l por hora), pero para ello sería necesario beber muchísima agua en un plazo muy corto de tiempo, así que es improbable que ocurra.