ACEITE DE COCO
El aceite de coco es un tipo de aceite vegetal. También se le denomina manteca de coco. Se obtiene al prensar la carne de dicho fruto, de tal manera que se logra un líquido que contiene un 90% de ácidos grasos.

Al ser tan graso, su proceso de oxidación es bastante lento, por lo que se mantiene a temperatura ambiente hasta una duración de 6 meses sin que se ponga rancio. Es por ello que su conservación es muy sencilla y duradera, como podemos comprobar.
Pero no solo sus usos son culinarios son interesantes. También se utiliza a nivel cosmético y como complemento saludable. Ya que está compuesto por los siguientes ácidos grasos:
Ácido Láurico
Ácido Caprílico
Ácido Cáprico
En este caso tendremos que distinguir entre tres grandes tipos de uso y propiedades del aceite de coco. El cosmético, el culinario y el de complemento nutricional.
Es un excelente aliño, que además de proporcionar un sabor exquisito y diferente, es rico en ácido láurico, un tipo de ácido graso que está presente en la leche materna. Por lo que resulta ideal para reforzar el sistema inmune, ya que es antibacteriano y antiviríco.
También se usa en esta modalidad por sus propiedades beneficiosas para la salud y para el cuidado de la piel y el cabello.
Las propiedades y beneficios del aceite de coco son muy numerosas. Hay que tener en cuenta que, aunque contenga ácidos grasos saturados, estos son de origen vegetal y no animal, y de cadena media, por lo que el cuerpo los asimila bastante mejor. Por tanto, no son tan perjudiciales y resultan más recomendables en la cocina que aquellos que proceden de grasa animal.